Desde el comienzo sabia que al cambiar de ciudad – Bogotá a Medellín- muchas cosas cambiarían radicalmente. Quizá algunas positivas y otras no tanto. Pero de lo que si estaba segura es que aprendería de alguna u otra forma. Aún sin saber mucho de Recrear Internacional y sus miembros – que por cierto todos son extranjeros y buena onda-.

Jonas Kaspersen, –viejo amigo- de nacionalidad danesa. Vive hace más de dos años en la ciudad de Medellín. Si lo ven, desde lejos lo pueden identificar por su cabello rubio; sus ojos azules y su gran espíritu colombiano. Él fue mi contacto directo con esta organización y quién me invitó a trabajar con ellos. Al llegar a la casa-oficina de Recrear, me recibe cordialmente. De inmediato, me presenta al resto del equipo de Recrear Internacional. Entre ellos estaba Kirsten Williams, una joven canadiense con rasgos un tanto latinos; de contextura delgada y con un swing salsero que pocos extranjeros poseen.

Posteriormente, conozco a Gioel Gioacchino. Una italiana muy extrovertida, con una sonrisa de par a par (siempre la verás sonreír) y unos ojos que al mirarte fijamente te intimidan de inmediato. De ahí en adelante, se convertiría en mi coordinadora directa y con la que estaría trabajando hasta el final.

Después de conocer el ‘wonder team’. Comienzo a recibir indicaciones sobre lo que sería mi labor dentro de Recrear. En primera instancia, apoyaría junto con Gioel el proyecto de investigación “Plata, Cultura y Cambio” (P.C.C). Que tiene como fin investigar cuál es la influencia que tiene la plata, dentro de la cultura organizacional de los colectivos juveniles en Medellín; cómo se relacionan estos términos y si existe una coherencia dentro de las organizaciones que les permita ser auto-sostenibles. Sin importar el perfil que tengan y la labor que desempeñen (social, cultural, ambiental, económico, político).

Todo este estudio es elaborado por medio de Investigación Acción Participativa (IAP). En donde se emplean herramientas prácticas, didácticas y creativas para adquirir procesos de reflexión y espacios de transformación. Que les permite a las organizaciones juveniles compartir experiencias con otros colectivos de su territorio. Y a su vez, repensarse como organizaciones que quieren generar un cambio en la ciudadanía.

Joseph Valencia, un joven bastante diplomático, líder innato. Es el representante de ‘Casa de Mariposas’ dentro de Plata, Cultura y Cambio. Él afirma que este proyecto (P.C.C) se ha convertido en un espacio para integrarse con otras organizaciones sociales, para conocer más sobre el potencial de la ciudad. Además de ser una plataforma muy interesante para revisar los procesos que se llevan a cabo dentro de su organización; retomando la historia, mirando los fracasos y triunfos que han obtenido. Esto con el fin de ponerlos en una mesa de discusión mediante palabras claves como “cambio”, “historia”, “plata”. Y empleando las herramientas que ha adquirido hasta la fecha gracias a la IAP.

Así pues, mediante encuentros y entrevistas a diferentes personas y organizaciones; comencé a comprender un poco más de qué trataba este proyecto y cuál sería mi labor. Tiempo después de llegar y establecerme en la capital de Antioquia, tuvimos un encuentro con varias de las organizaciones que hacen parte de P.C.C.; ¡Debo admitir que estaba muy ansiosa por conocer a los integrantes de este proyecto!

Nos citaron cerca al Museo Casa De La Memoria. Ahí nos recibió un extraño personaje, con un atuendo nada peculiar y muy anticuado para mi gusto. Se trataba de Agustín José, un chico con un aspecto del siglo pasado que nos recibía muy alegre; en su espalda llevaba una jaula –para llevar las gallinas de encomienda a los vecinos- y en su mano un teléfono improvisado con latas y un cordel. Él se tomó la labor de llevarnos hasta la locación donde realizaríamos el cuarto encuentro –primero para mí-. Al llegar al lugar comprendí que aquel joven que nos recogió era miembro del elenco ‘los chicos del siglo XX’. Un colectivo teatral y también miembro de P.C.C.

Quedé bastante sorprendida con los actores de este grupo y con el lugar pues era muy antiguo, pero con cierta calidez.

Después de un día de charlas, dibujos y juegos interactivos. Comencé a conocer un poco sobre otros representantes miembros de P.C.C. Entre ellas Liliana Zapata, una mujer extrovertida y con muchos conocimientos ancestrales. Directora de ‘Encuentro de Voces y Palabras’, ubicada en la comuna 5 de Medellín. Su labor como líder es generar espacios de esparcimiento artístico y cultural, donde los jóvenes a través de la palabra visibilicen las problemáticas de su comunidad. Resignificando los espacios públicos y produciendo en los espectadores reflexiones profundas.

Por otro lado, Carla Bajonero una joven interactiva, líder ambiental y amante de la cocina. Es la fundadora del parche ‘Deditos Verdes’; también establecida en la comuna 5 de Medellín. Su misión es invitar a las personas de la ciudad a que se reconecten con la tierra, realizando muchas actividades ecológicas, siendo la siembra la más importante.

Al finalizar el encuentro, pude detallar la diversidad de movimientos que hacen parte de Plata, Cultura y Cambio. Siendo agradable, pues los debates se hacen más amenos y consistentes. A su vez, generándome un montón de preguntas que esperaba a la larga responder con claridad. También pude identificar que ante la diversidad, tiene algo en común. Y es la problemática que han presentado todos -o la gran mayoría-, frente al tema de Presupuesto Participativo (PP). Siendo uno de los temas más polémicos en el territorio social.

Estos líderes tienen claro que para que sus colectivos se mantengan en el tiempo; deben tener los recursos necesarios. Pero no todo es color de rosa para ellos. A ciencia cierta, son pocas las organizaciones sociales que cuentan con la financiación y estabilidad administrativa. De ahí que, emane como respuesta el hecho de acudir a concursos como los de PP. Pero sin la relativa seguridad de que se podrá ganar y obtener los recursos deseados para sostenerse en el tiempo como organismo social.

Aún estoy a la expectativa de lo que pueda ocurrir con estos colectivos, parches, organizaciones, y movimientos sociales más adelante. ¿Lograrán mantener su autonomía? O por el contrario ¿seguirán siendo dependientes de los recursos estatales?

Carolina López Barrera

Estudiante de Relaciones Internacionales y Estudios Políticos de la UMNG-Bogotá. Practicante de Recrear International